Claims Contractuales: Guía Práctica para su Prevención y Manejo
Entendiendo los Claims Contractuales
Un Claim no es necesariamente un conflicto o una señal de fracaso en la relación comercial.
Por el contrario, es un mecanismo formal y legítimo del contrato. A través de este, las partes pueden solicitar compensaciones o ajustes en los términos contractuales.
La clave está en gestionarlos profesionalmente desde el primer momento.
Monitoreo Preventivo e Identificación Temprana de Riesgos
Es fundamental establecer sistemas y procesos que permitan detectar potenciales reclamaciones antes de que escalen. Esto incluye:
- Revisión regular del cumplimiento contractual
- Monitoreo continuo de desviaciones en alcance, costos o plazos
- Análisis periódico de la documentación del contrato
- Utilizando canales de comunicación efectivos entre las partes
La Importancia Crítica de la Documentación
Una reclamación exitosa requiere mantener registros detallados y organizados. Es fundamental establecer un sistema robusto de documentación que incluya:
- Cronología detallada de eventos y decisiones clave
- Comunicaciones formales entre las partes
- Informes técnicos y evaluaciones independientes
- Registros financieros y de pagos del contrato
- Respaldos fotográficos y audiovisuales del proyecto
Comunicación Profesional y Estratégica
La manera en que se comunica un claim puede ser tan importante como su contenido. Una comunicación efectiva debe ser:
- Clara y objetiva, evitando lenguaje emotivo o confrontacional
- Oportuna, siguiendo los plazos establecidos en el contrato
- Formal, utilizando los canales de comunicación acordados
- Documentada, manteniendo registros de todas las interacciones
Cuantificación Objetiva, Precisa y Detallada
La valorización de un claim debe basarse en datos objetivos y verificables. Una cuantificación profesional considera:
- Costos directos claramente identificables
- Impactos indirectos documentados
- Análisis de programación y cronogramas
- Metodologías de cálculo reconocidas en la industria
La Prevención como Foco Principal
La mejor manera de manejar claims es evitarlos cuando sea posible. Algunas estrategias preventivas incluyen:
- Redacción clara y detallada de contratos
- Definición precisa de alcances y responsabilidades
- Establecimiento de mecanismos de resolución temprana de disputas
- Fomento de relaciones colaborativas entre las partes
Abordaje Escalonado para una Resolución Efectiva
Cuando surge un claim, es recomendable seguir un enfoque escalonado para su resolución:
- Negociación directa entre las partes
- Mediación con un tercero neutral
- Dispute Boards o paneles técnicos
- Arbitraje o litigio como último recurso
Los claims bien gestionados fortalecen las relaciones comerciales y minimizan el riesgo de destrucción de valor para todas las partes involucradas.
El uso de contratos colaborativos (NEC, FIDIC u otros), junto a mecanismos de tratamientos de claims, crean un marco robusto para abordar en forma exitosa este tipo de desafíos.